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Educar para la paz y la no violencia Niño

Educar para la paz y la no violencia

El 30 de enero celebramos el Día Escolar de la No Violencia y la Paz. Es fundamental que, desde las primeras etapas de la infancia, los niños reciban una enseñanza que les ayude a entender los beneficios del diálogo y la negociación para resolver las diferencias que comprendan el significado de la violencia y los factores que la provocan, es decir, la necesidad de una educación para la no violencia.

La Declaración Universal de los Derechos Humanos y la consideración de la paz como una situación justa sobre la que se sostiene y define la educación del ser humano son elementos fundamentales de este concepto de educación que no se limita únicamente al marco de la escuela, sino que se amplía a la realidad global de la persona que vive en una sociedad muy dinámica sujeta a rápidos e importantes cambios interconectados a lo largo de todo el planeta. Un elemento fundamental dentro de la Educación para la Paz es la consideración del acto educativo como un proceso en el que los niños son parte activa importantísima del mismo y donde la resolución no violenta de los conflictos supone un eje básico de actuación para el cambio personal y social.

Los padres, familia y profesores desempeñan un papel fundamental en las primeras etapas para que los niños se enfrenten y vivan  sus emociones sin usar la violencia construyendo aulas y hogares seguros en la expresión de los afectos. Las conductas violentas o agresivas suelen aprenderse a una edad temprana, aquí dejamos algunas sugerencias que pueden resultar útiles en casa:

  • Relación sólida con los hijos y desarrollo de la confianza desde las primeras etapas de la vida, cariño y atención constantes.
  • Ofrecimiento continuado de nuestra protección y apoyo como padres. 
  • Participación conjunta (padres-hijos) en el establecimiento de reglas para generar unas expectativas claras de la propia conducta.
  • Elogio de las conductas positivas de los hijos con el objetivo de potenciar sus fortalezas utilizando nuestro ejemplo de honestidad, respeto y nobleza.
  • Enseñanza de la aceptación de otros niños de diferente raza o etnia y oposición a la violencia: palabras firmes y calmadas frente a la actitud violenta.
  • Alejar del hogar los actos violentos, cuidado con las exposiciones de violencia que aparecen en Internet, redes sociales, televisión…

 

* Artículo elaborado por Ana Roa, Psicopedagoga y fundadora de Roaeducación.