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10 claves para padres de gemelos Niño

10 claves para padres de gemelos

Tienen el mismo ADN y entre ellos hay una conexión especial, pero cada uno debe sentirse único y desarrollar su propia personalidad cuanto antes.

Cada vez hay más familias con gemelos, una experiencia única, pero también un auténtico reto que, en el ámbito de la educación, puede llevar a cometer ciertos errores que dificulten a cada niño desarrollar su propia personalidad.

Y es que, aunque estos pequeños compartan identidad genética y una apariencia física casi imposible de diferenciar, son personas distintas. Así, desde que nacen hay que procurar ofrecerles una educación adecuada a su situación (distinta sin duda a la de un único hijo), aprovechando las ventajas que supone tener otro hermano como ellos, pero también intentando evitar los inconvenientes. No compararles en todo y respetar su forma de ser es básico y además será muy importante que, conforme vayan creciendo, les dejemos escoger ciertas cosas. Ellos nos indicarán cómo quieren ser tratados y deberemos preguntarles, tener en cuenta sus opiniones y respetar sus decisiones. Hasta entonces, ir fomentando que sean únicos depende de nosotros.

 

La vida en dúo

En las relaciones de los gemelos suele haber uno más rebelde y “mandón”, normalmente el hermano que nació en segundo lugar. El que se considera “el mayor” suele ser más sociable y puede hacerse más responsable del otro.

Los niños gemelos tienen en su hermano a un perfecto compañero de juegos, con lo que pueden tender a aislarse un poco más del entorno. Incluso pueden presentar retrasos en el lenguaje, ya que algunos estudios apuntan a que entre ellos se comunican de un modo especial, llegando a desarrollar un idioma propio.

A esto se suma que muchos padres se sienten tan orgullosos de tener gemelos que les consienten demasiado y pueden fomentar que sean egocéntricos y egoístas con los demás niños.

Por último, hay que tener en cuenta que, como tienen exactamente la misma edad, pasan por los cambios típicos de cada etapa, al mismo tiempo, lo que puede crear cierta competencia entre ellos y algún que otro conflicto familiar.

Así, en el día a día, hay que estar atentos a detalles como estos estos, para poder actuar a tiempo y ayudarles a que se integren, siempre fomentando su individualidad.

 

¿Juntos en el colegio?

Existe mucha controversia entre si se debe separar o no a los gemelos en el ámbito escolar. Varios estudios han puesto de relieve que compartir aula no influye en el éxito o el fracaso escolar. Por ello, en general, los padres suelen optar por que compartan las clases y estudien juntos, ya que les puede servir para apoyarse mutuamente y complementarse en las materias que se le dan mejor a cada uno. Lo importante es que los profesores no los estén constantemente comparando y que los traten como alumnos independientes, preferiblemente separándolos en distintos grupos a la hora de hacer los trabajos.

También es fundamental que cada hermano tenga un grupo de amigos independiente.

Además, en estos casos, para potenciar la individualidad sería bueno apuntarles a actividades extraescolares distintas, según sus gustos. 

Sin embargo, cada caso es único y la familia y los maestros serán los que decidan, analizando las relaciones entre los hermanos en ese momento.

Eso sí, si decidimos hacerlo tendremos que esperar a que ellos estén preparados para la separación, por lo que nunca deberá ser en la niñez temprana (no antes de los seis años).

 

10 claves para padres

Aquí tienes algunos consejos para poder sacar lo mejor de cada gemelo:

  1. No les pongas nombres parecidos o que suenen igual. El nombre es un potente elemento de identificación y tiene que hacer que el niño se diferencie de su hermano.
  2. No te refieras a ellos como “los gemelos”: usa siempre sus nombres, como lo harías con dos hermanos de diferentes edades.
  3. No les vistas igual: es típico que los padres lo hagan desde que los gemelos nacen, ¡están tan graciosos! Sin embargo, esto puede condicionar mucho la formación de su identidad. Si ya de por sí su parecido físico es casi idéntico, peinarlos y vestirlos igual no favorecerá nada que se sientan únicos.
  4. Encargaos de ellos indistintamente: hay que evitar que el padre se ocupe siempre de uno y la madre de otro.
  5. Ayúdales a hacer actividades sin su hermano: ya sean deportes u otro tipo de tareas que les interesen.
  6. Pasa tiempo con cada uno: para conocer a cada niño lo mejor posible, debes dedicarles atención y pasar tiempo con ellos, por separado
  7. Evita que uno hable o conteste por el otro: cada uno se debe desenvolver por sí solo.
  8. A cada uno, lo suyo: felicita a cada niño por sus logros individuales y también hazles saber quién de ellos se ha comportado incorrectamente.
  9. No los compares constantemente: cada uno tiene sus destrezas, su inteligencia, sus gustos, en definitiva, su personalidad.
  10. Fomenta que se separen de vez en cuando: por ejemplo, yendo a excursiones distintas o durmiendo en casa de amigos diferentes.