El desarrollo del bebé a partir de los 6 meses Bebé
Desde que nace, el bebé tiene innato el reflejo de búsqueda y succión del pecho de su madre para alimentarse. La lactancia materna es el mejor alimento que puede tomar un recién nacido, ya que le aporta grandes beneficios: facilita la digestión, estimula las propias defensas y favorece el desarrollo neurológico y visual. Por ello, se recomienda que el bebé se alimente de leche materna al menos hasta los 6 meses de vida. A partir de entonces, los alimentos que se introduzcan en la Alimentación Complementaria así como las propiedades esenciales de la leche, se convierten en imprescindibles para que el bebé comience a adquirir cierta autonomía. Su desarrollo, que hasta ahora nos parecía increíble, se acelera, aprendiendo nuevas habilidades casi cada día.
6-8 meses
- Boca abajo, levanta la mitad de su cuerpo
- Se mantiene sentado con mínima ayuda
- Puede darse la vuelta fácilmente
9-10 meses
- Mueve las piernas para reptar y gatear
- Comienza a ponerse de pie
- Hace pinza con los dedos índice y pulgar
- Se divierte tirando los juguetes y viendo cómo caen
11-12 meses
- Comienza la marcha autónoma
- Identifica su nombre y mira si lo llaman
- Entiende qué significa “no” y otras órdenes
+12 meses
- Sobre los 15 meses puede caminar solo
- A los 18 es posible que suba y baje escaleras cogido de la mano
- Desde los 18 meses mejora notablemente la comprensión del lenguaje
La lactancia materna favorece su crecimiento y desarrollo. Sin embargo, cuando ésta no es posible, existen fórmulas infantiles adaptadas y clínicamente probadas que le aportan todos los nutrientes necesarios para un crecimiento adecuado.
¿Qué beneficios aporta la leche a su desarrollo?
La leche es el alimento esencial para un bebé hasta los dos años de vida, ya que es fundamental para el desarrollo de su sistema nervioso y visual, además de ofrecerle todos los nutrientes para que crezca fuerte y sano.
La leche aporta ácidos grasos esenciales, como Omega-3 y Omega-6, que ayudan al desarrollo del cerebro y la retina, además de prevenir desórdenes autoinmunitarios y otras enfermedades.
Las proteínas y grasas propias de la leche materna ayudan a una digestión suave y rápida. Asemejándose a ella, hay fórmulas de continuación que utilizan proteínas de leche de cabra -en lugar de la tradicional leche de vaca- y cuyas propiedades favorecen la digestión, ayudando a mejorar el estreñimiento leve, los cólicos y las regurgitaciones.
Si por diversas razones no puedes dar el pecho, Capricare es una fórmula de continuación clínicamente probada y nutricionalmente completa que aporta a tu bebé todos los beneficios y las propiedades naturales de la leche de cabra.
*Información proporcionada por Bebé Innova.